El PSOE anima a secundar la huelga de hoy contra la LOMCE

“Es una norma que no garantiza la igualdad de oportunidades y responde a una ideología retrógrada”.

El secretario local, David de la Encina, en nombre de la comisión ejecutiva socialista, ha hecho un llamamiento al profesorado, alumnado y padres y madres para secundar hoy la huelga educativa que está convocada en rechazo a la llamada Ley Wert. “Una ley que no garantiza la educación como factor de desarrollo y de igualdad de oportunidades”, señaló. 

Por ello, el PSOE tiene previsto estudiar el alcance de esta ley para verificar su constitucionalidad, pues como ha destacado De la Encina “la reforma que plantea el Gobierno de Rajoy puede vulnerar el derecho universal a la educación”. De hecho, como sostiene el portavoz socialista “desde el mismo preámbulo de la ley existen razones para oponerse, pues se refiere a la educación como el motor que mueve la competitividad de la economía y el nivel de prosperidad de un país. Afirmación que deja a un lado la educación en valores con mayúsculas, la atención a la diversidad del alumnado con necesidades educativas espaciales y la variabilidad de itinerarios y caminos pedagógicos para la consecución efectiva de los objetivos de cada etapa educativa según las características personales del alumnado, propia de la legislación anterior”.

Por su parte, desde el grupo de trabajo de Educación del PSOE portuense, que ha estado analizando la reforma que propone el Ministro Wert, su coordinador, Ángel Quintana ha explicado que “la LOMCE nace sin el consenso de la comunidad educativa, al antojo programático de una ideología retrógrada de derechas y con el vicio adquirido de la falta de una inversión económica justa y necesaria para la prestación de un servicio educativo público de calidad”.

En cuanto a la organización de los centros, la norma convierte a los Consejos Escolares en meros órganos consultivos de adorno (art. 127), al Director del centro (especificado en masculino en toda la ley) en gerente omnipotente con atribuciones amplias en el ámbito disciplinario y en la contratación de personal, siendo seleccionado por una comisión cuya composición depende en 2/3 de la administración (artículos 132 y 135) y al profesorado se le puede trasladar de centro de manera forzosa y de nivel educativo (véase disposición transitoria de la Ley).

Por tanto, como indica Quintana “el profesorado sufre un ataque frontal a su labor profesional al quedar eliminada la potestad evaluadora al término de cada ciclo y etapa, multiplicándose las pruebas externas como control de la calidad de la enseñanza con valor académico y propedéutico en algunas de ellas”.

Asimismo, y debido al sistema de reválidas con pruebas en sexto de Primaria (art. 21), en tercero de la ESO (art. 28), en cuarto (art. 29) y al final del Bachillerato, el sistema se convertirá en una especie de carrera para preparar al alumnado a las continuadas pruebas selectivas y finales, dejando a un lado el verdadero sentido global de la educación.

Otro de los asuntos que rechazan desde el PSOE es la desaparición de las medidas de atención a la diversidad, legalizando la segregación del alumnado en torpes-listos, niños-niñas… y desapareciendo la inclusión educativa y la atención al alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo.

En cuanto a las asignaturas y currículos, a juicio de Quintana “la norma que promueve el PP elimina algunas materias, como Educación para la Ciudadanía, con la excusa de la no competitividad, mientras que otras como religión sale reforzada. Lo que demuestra el marcado carácter ideológico de esta ley, que junto a los recortes en becas, van a llevar a los estudiantes cuyo nivel de renta no les permita continuar, a salir del sistema educativo, especialmente en el ámbito universitario”.

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